Gracias, Bieno (1).

  En la última edición de Retromadrid, coincidí con Bieno, que me tenía preparada una sorpresa, una versión en cinta de Mansión Kali y dos cartuchos para el Vic-20, la verdad que me dejó totalmente en fuera de juego, cuando tienes una afición y encima encuentras gente que merece la pena ya es demasiado. Generalmente, en los foros no suelo ser muy activo, ya que me gusta permanecer un poco en la sombra aprendiendo de gente que sabe más que yo de esto, procuro aportar en la medida de mis posibilidades y actualmente acudo a pocos eventos, limitándome a los más cercanos por tiempo y situaciones económicas, quizás esta imposibilidad de poder disfrutar al 100% hace que me vuelque en este blog, de nuevo muchas gracias Bieno.

Raid on Fort Knox.

  Tras desempaquetar el juego, nos encontramos con el cartucho en su plástico, lo insertamos en nuestro Vic y vamos a intentar desvalijar las reservas de oro de Fort Knox, lugar donde están almacenadas las reservas de Estados Unidos y de otros muchos países, protegidas por excelentes medidas de seguridad, hemos conseguido infiltrarnos y empezamos a hacer un reparto más equitativo de la riqueza mundial.

    El menú de inicio, podemos manejar a nuestro personaje con el joystick o el teclado, debemos coger el oro y dirigirnos a la salida evitando los guardias en el trayecto, la dificultada se va incrementando aumentando el número de lingotes de oro a robar y el número de vigilantes.

    Primera pantalla, nuestro personaje accede por la esquina superior derecha, los lingotes (3) están en la zona central izquierda, al lado, podemos ver el guardia, en esta pantalla sólo es uno, llegamos al lingote y sorpresa, se activa una cuenta atrás limitando el tiempo que tenemos para salir con el lingote.

    Una vez superado el nivel, pasamos al siguiente, en este hay dos guardias y más lingotes a recoger, un juego atractivo y que incrementa su dificultad al aumentar el número de enemigos, lingotes a recoger y variando el laberinto en cada nivel.

Resumen y evaluación del videojuego.

Gráficos: 6. Sonido: 5. Dificultad: 5. Originalidad: 7. Jugabilidad: 8.

   Pese a las limitaciones del Vic, sobre todo en gráficos esto si que eran pixels como ladrillos, es muy adictivo, la idea de incorporar tiempo para llegar a nuestro objetivo hace que sea más difícil sin hacerlo imposible, es bastante fácil superar los primeros niveles tras una o dos partidas para hacernos con los controles, el único punto negativo es no haber aprovechado algo en lo que el Vic era superior a los ordenadores de su tiempo, como era el sonido, una melodía que acompañará nuestras andanzas por Fort Knox habría hecho más atractivo este juego, aún así, un buen juego sencillo y adictivo.